El abecedario en morse de tu tacón de aguja envía un te quiero a ras de suelo de 0,0001 en la escala de Richter de la planta de mi pie. Acaricio su piel y en un escalofrío me cuenta en Braille que me seguirá esperando y en el gesto de su mano casi acariciando el aire me dice que siempre y que nunca y que todo y que a veces.
Enciende un cigarrillo y en un suspiro de señales de humo se puede leer que tu sueño amaneció y la O en un canuto final queda suspendida en la atmósfera. Después el tam-tam del mechero en tus manos envía exóticos cantos de amor y de guerra. Nos sirven la cena y también en las entrañas del pollo se puede leer que nuestro destino es el mismo.
Luego, en la coreografía que bailaremos quedará escrito en la pista de baile la palabra amantes. Salimos a la calle y todos los semáforos palpitan en rojo pasión por lo nuestro y el viento nos silva canciones de amor y en las estrellas se puede leer que es para siempre y los grillos murmuran que se mueren de envidia. Hasta en tus labios puedo leer la forma perfecta de letras a besos diciendo te quiero una vez más.
Sin embargo, tus ojos me dicen que no. Y aunque en mil lenguajes me digas te quiero, ti amo, je t’aime, I love you, t’estimo, wo ae ni,… tus ojos no mienten…y dicen que no.
[imposiblenoexisto]