Hace años vi una encuesta en la que indicaban que en España se tiene menos s e x o que en otros países europeos. Desconozco si ese baremo habrá cambiado. No recuerdo las causas que aducían. Así pensando a la ligera, puede que se deba a la calidad de vida.
Tenemos un país magnífico, al que se le saca poco partido, y con un nivel exacerbado de empresas mediocres, que no entienden que cuanto mejor pagados estén los trabajadores, mayor rendimiento obtendrá la empresa, y el esfuerzo individual. Empresas de atención telefónica como Konecta, pagan menos de mil euros, creo que novecientos, a personas que llevan muchos años, y tienen dos carreras. Eso tiene que ser de los más desmotivador.
Sea como fuere, he visto que los especialistas del Instituto de Medicina del Deporte de Viena han publicado un informe sobre el verano y, por regla general, en junio-julio, los ciudadanos tienen relaciones í n t i m a s con el doble de frecuencia que en otras épocas del año. ¿Por qué? La respuesta es simple: quieren. El cuerpo lo demanda.
Indirectamente, las conclusiones de los austriacos son confirmadas por sus colegas estadounidenses. Según ellos, en los estados del sur, en promedio, tienen relaciones s e x u a l e s aproximadamente 2 veces más a menudo que en los del norte: 102 veces al año contra 64, respectivamente.
Profundicemos más: el impulso s e x u a l – la libido, científicamente hablando, tanto en hombres como en mujeres, aumenta las hormonas s e x u a l e s – testosterona y estrógeno. En días largos de luz, bajo la influencia de la radiación ultravioleta y el calor, se multiplican y se vuelven más activos. En ambos s e x o s, también hay una cantidad suficiente de oxitocina, la hormona del amor, que empuja a la pareja a los brazos del otro, para besarse y, si se continúa, contribuye al logro del placer extremo, lo realza y lo dirige a nuevos placeres. En el camino, las glándulas suprarrenales inyectan adrenalina, la hormona de la aventura.
Las personas que no son mimadas con tanta frecuencia por el calor del verano son especialmente sensibles al aumento hormonal. Esto afecta notablemente a los países de climas invernales superfríos como los nórdicos, Ucrania, Rusia (Siberia), calentados por el repentino ataque de calor, un récord, como aseguran los meteorólogos. En algunos lugares, más de 30 grados e incluso más de 35. En Canadá, y explico más abajo el porqué, no se puede practicar s e x o con 47-50.
Las reacciones s e x u a l e s a la luz ultravioleta y las altas temperaturas solían ser características de las “personas desplazadas”, es decir, veraneantes que llegaban a los centros turísticos del Mar Negro (por ejemplo) desde un clima templado. Esto fue confirmado experimentalmente por el macho local, que no sabe nada de endocrinología, para quien las damas visitantes siempre han sido presa fácil.
Y últimamente, por el calor, el sol y las playas, no tienes que ir muy lejos. Un incentivo adicional para los residentes de estos países: las fresas se han ido, pero conviene localizarlas en mercados. Los científicos lo consideran una baya vasodilatadora: Viagra natural. El zinc contenido en las semillas refuerza la potencia. Y según los rumores, también mejora la s e x u a l i d a d en las mujeres.
Por cierto, las estadísticas del Ministerio de Salud de países como la Federación de Rusia sirven como prueba indirecta del hecho de que “realmente lo quiero en el verano”. Ella testifica: el pico de la tasa de natalidad nacional cae en marzo. Esto significa que las concepciones caen en junio – julio.
Sin embargo, los expertos austriacos del mismo Instituto de Medicina Deportiva advierten: la vida s e x u a l en el calor se vuelve muy arriesgada. La carga sobre el corazón aumenta y, en consecuencia, sube la probabilidad de un ataque cardíaco. Los médicos deportivos europeos recomiendan renunciar al s e x o por completo si el termómetro exprime la columna por encima de los 30 grados. La presión arterial aumenta hasta 30 puntos contra 10 en un ambiente más fresco. Lo cual es extremadamente peligroso para pacientes hipertensos e hipotensos.
El daño fisiológico del s e x o en el calor, descubierto por los austriacos, es aterrador, pero no mucho, especialmente para los ciudadanos y las mujeres que todavía gozan de buena salud. Son celosos y comparten sus impresiones en las redes sociales. El rango va desde el rechazo extremo hasta el deleite violento. A ambos lados. A primera vista, el placer parece cuestionable. Por otro lado, sudan juntos, mientras inhalan los aromas que los acompañan, saturados de feromonas, sustancias volátiles que estimulan la atracción .
Alguien incluso se siente atraído por la oportunidad de deambular con cuerpos sudorosos uno alrededor del otro. No se recomienda a los conocedores de dicha interacción táctil que enciendan el aire acondicionado. En el calor, por cierto, muchas parejas tímidas se atreven a hacer tales experimentos en la cama, que eran incómodos de realizar debajo de una manta. Y algunos incluso van juntos a la ducha, donde un procedimiento de higiene de las articulaciones a veces desemboca sin problemas en algo más.
En el frío de febrero, estas ideas rara vez vienen a la mente. Pero vayamos con unas breves recomendaciones sobre seguridad s e x u a l en verano, que a veces se tienen en cuenta inconscientemente (no perfumarse) y otras se pasan de largo.
Bosque: en la oscuridad da miedo hacerlo en el bosque, durante el día puede estar lleno de recolectores de setas. E incluso lo mismo que ustedes, gente a a la que no le gustaría ver a parejas. Debo decir que en maizales de pueblines de Castilla y León, te puedes encontrar a tropecientas, precisamente de noche, y lo que incomoda, y mucho es que los niños pasen por allí a jugar. Tienes que echar un buen vistazo a tu alrededor. Incluidas las hormigas. No puedes esconderte de los mosquitos en absoluto.
Ni lo dudes: seguro que querrán participar. Por lo tanto, frótate con repelentes con anticipación. Por supuesto, los productos químicos reducirán el área de la superficie del beso al mínimo, muy amargo. Pero sin ellos, créanme, es posible que el s e x o no tenga lugar en absoluto. Se aplican consideraciones similares a lugares que, de hecho, están cerca del bosque. De alguna manera campos con pasto y mazorcas de maíz hasta la cintura. El campo no es peor que el bosque en términos de lugar de encuentro. Y tal vez sea mejor, no hay mosquitos.
Playa: todo el mundo está bien, especialmente en las suaves noches de verano. Y el agua, tan tibia como la leche fresca, cerca, es práctica. Pero está la arena … O la hierba salpicada durante el día. Incluso habiendo esparcido algo, el contacto no se puede evitar: algo se pegará en alguna parte. Esto reduce la intensidad de las pasiones. Y quedan magulladuras de grandes guijarros en la espalda. Por ello, los expertos recomiendan playas equipadas con tumbonas. Y los colchones hinchables traídos con ellos. Un poco estrecho, por supuesto. Pero sin magulladuras ni arena.
Vestidor: el único, aparentemente, lugar donde puedes retirarte en la playa, incluso con una gran multitud de personas. El objeto es la adrenalina, en términos de la severidad de las sensaciones se equipara a un baño en un avión. Sin embargo, otras cabinas pueden resultar molestas. Huele, al menos.
Después de todo, algunos ciudadanos irresponsables realmente los usan como retretes. Las cabinas generalmente no cubren la parte inferior de las piernas. Y cuatro de ellos pueden despertar la correspondiente curiosidad. Dos piernas masculinas y una femenina, incluso más. El tiempo es limitado. Aquellos que deseen simplemente cambiarse de ropa pueden atormentarse con golpes persistentes.
Agua: buen medio de camuflaje. Desde el exterior, por regla general, y según mi parecer, hiperestimulante. Es difícil entender para los demás lo que está haciendo allí: abrazar o … La ley de Arquímedes ayuda a la comunicación agradable: reduce el peso corporal. El agua está disponible incluso durante las horas del día. Y con una alta densidad de bañistas. Pero el agua amenaza con introducir microorganismos en tu interior. Especialmente en aguas dulces ricas en ellas. Debes tener cuidado con las conchas pegajosas y afiladas.
No te excedas con el alcohol y el maquillaje. Beber: promueve una comunicación más profunda entre sexos. Pero en el calor, la dosis debe reducirse drásticamente. Por una sencilla razón: el alcohol se absorbe fácilmente. Puede, como dicen, “arrastrar”. El deseo natural de tratar a una dama también es tenso.
Una dama puede exagerar, pero tú, me temo que no, y simplemente no podrás continuar porque podrías hasta temblar del pavor que te puede dar el hacerlo en entornos naturales. Ellas tienen ventaja en eso, y no suelen desmotivarse si realmente sienten pasión.
Cosméticos: con el calor, cualquier cosa huele más molesta que la caca de una vaca. Y el perfume también tiene un sabor desagradablemente amargo. No es en absoluto un hecho que tal ataque químico no desanime a una pareja de todo deseo. Sería más prudente que las mujeres no abusen de los aromas extraños. Suficiente son los suyos naturales. Después de todo, no hay nada mejor que el olor de un cuerpo limpio.
Esto que indicaré puede resultar asombroso, o insólito pero dos amantes alegres y una tormenta eléctrica son muy estimulantes. Eso sí, no hay que ponerse a hacerlo debajo de árbol de ninguna clase. No es necesario recordar constantemente que los rayos pueden matar. Los científicos han revelado el efecto de la electricidad atmosférica en las relaciones íntimas.
Unas últimas advertencias:
Anticoncepción : especialmente necesaria en verano. A menos que, por supuesto, haya planes para tener hijos. Los austriacos, pero otros distintos, de la Universidad de Innsbruck, aseguran que los intentos de concepción más exitosos ocurren en días claros y calurosos. O noches después de días claros. Y en condiciones nubladas y frescas, la eficiencia de fertilización se reduce en aproximadamente un 15 por ciento. Las razones son todas las mismas: aumento hormonal de la radiación ultravioleta y aumento de la temperatura.
Los estudios que los psicólogos y sociólogos estadounidenses llevaron a cabo para una empresa de anticonceptivos muestran que el 70 por ciento de los encuestados tuvo relaciones s e x u a l e s durante una tormenta.
Es decir, sintieron la influencia de la electricidad atmosférica y el ozono. Y ellos, como resultó en el camino, cambian el fondo hormonal más que el calor que precede a la tormenta. Especialmente en los hombres. Pero actúan sobre personas de diferentes temperamentos de diferentes maneras. Las personas coléricas y sanguíneas tienen un exceso de adrenalina y testosterona. Estas hormonas sumergen a los hombres en una ansiedad primaria, los ponen nerviosos y provocan una ansiedad sexual aguda. Las personas coléricas y sanguíneas se dan cuenta de ello de manera brillante, violenta y audaz. Si se da tal caso, por supuesto.
Pero en las personas flemáticas y melancólicas, la electricidad atmosférica no funciona bien, debido a un exceso de la hormona de la debilidad, la acetilcolina. Las personas flemáticas se sienten perezosas y letárgicas, las personas melancólicas sienten fatiga y ansiedad.
Como referencia: las personas coléricas son rápidas, móviles y fácilmente excitables. Las personas sanguinarias son alegres, activas, sujetas a rápidos cambios de humor, pero lo bueno suele prevalecer. Las personas flemáticas son lentas y tranquilas, por regla general, bondadosas. Melancólico: el mismo flemático, pero desequilibrado y retraído.
Conviene recordar que hay que tener en cuenta aspectos relacionados con la pandemia y las parejas, algo sobre lo que en España no se ha incidido apenas nada, y algo que sabe todo el mundo, consciente o inconscientemente, las relaciones cansan, xD. Y sin embargo es escaso el personal que trabaja la respiración enfocada al sexo.
