La primera frase anunciaba un día lluvioso. La segunda acababa empapada de adjetivos humectantes, acuosos y líquidos; a la tercera frase en su catorceava palabra después de una coma salió el, Sol. Y crecieron las flores hasta llegar a flores y brilló el arco iris. Y se evaporaba el agua y se podía leer entre líneas su invisible ascensión al cielo de la primera frase donde se iba condensando en un día lluvioso.
Empezó el mundo en un empezó el mundo, y todo lo que siguió –palabras a la deriva-, no eran sino restos de trayectorias azarosas de cometas. Apareció el Ser, disfrazado de hombre ,que antes fue homo sapiens , y antes había sido homo erectus, un poco después de ser un homínido, el cual procedía de un mamífero indeciso, que llegó a la tierra des del mar donde era pez.
Aunque antes de serlo fue un organismo unicelular, bastante tiempo atrás simplemente fue un trocito de Sol. Y por esa escalera de seres, peldaño a peldaño, la existencia ascendió hasta llegar al Ser y desde el trampolín del hombre el Ser saltó al vacío. Después, en un acrobático tirabuzón, llegó hasta la conciencia. Fue un salto imperfecto porque para la perfección el Ser jamás hubiera saltado.
[imposiblenoexisto]